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 La vida es demasiado corta para que la hagamos mezquina.
| Benjamin Franklin | 
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Las leyes demasiado benévolas, rara vez son obedecidas; las demasiado severas, rara vez son ejecutadas. | Benjamin Franklin |
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Lo que empieza en cólera termina en vergüenza. | Benjamin Franklin |
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Los hombres son criaturas muy raras: la mitad censura lo que ellos practican, la otra mitad practica lo que ellos censuran; el resto siempre dice y hace lo que debe. | Benjamin Franklin |
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Más vale un gramo de cordura que arrobas de sutileza. | Benjamin Franklin |
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No anticipéis las atribuciones ni temáis lo que seguramente os puede suceder. Vivid siempre en un ambiente de optimismo. | Benjamin Franklin |
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Quienes son capaces de renunciar a la libertad esencial a cambio de una pequeña seguridad transitoria, no son merecedores ni de la libertad ni de la seguridad. | Benjamin Franklin |
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Resuélvete a hacer lo que deseas, y haz sin falta lo que hayas resuelto. | Benjamin Franklin |
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Sé cortés con todos; sociable con muchos; familiar con pocos. | Benjamin Franklin |
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Si el hombre alcanzara la mitad de los deseos que tiene, redoblaría sus inquietudes. | Benjamin Franklin |
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Si el tiempo es lo más caro, la pérdida de tiempo es el mayor de los derroches. | Benjamin Franklin |
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Si los hombres son tan perversos teniendo religión, ¿cómo serían sin ella? | Benjamin Franklin |
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Si no quieres perderte en el olvido tan pronto como estés muerto y corrompido, escribe cosas dignas de leerse o haz cosas dignas de escribirse. | Benjamin Franklin |
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Si quieres conocer el valor del dinero, trata de pedirlo prestado. | Benjamin Franklin |
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Ten tus ojos bien abiertos antes del matrimonio; y medio cerrados después de él. | Benjamin Franklin |
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